Es el de camisa blanca y se llama Juan.
Y a decir verdad últimamente (y cuando digo últimamente digo los últimos años) anda medio hinchado las pelotas por cosas por las que también yo estuve hinchada.
Y como a cada rato se encarga de recordarme que no me corre sangre por las venas, solamente le quería decir que soy capaz de decir que quiero a alguien: Juan , te quiero mucho.
Y mirá si te querré, que hasta te estás convirtiendo en el hombre de mis sueños.
Y no me gustaría que respondas a este post cursi con uno de tus tan repetidos comentarios ordinarios.
Para eso, ni respondas.
1 comentario:
jamás pense encointrar esto en tu blog.. fui a ver lo que pusiste ayer sobre nuestra converscion y me encuentro con esto!
Gracias... sos genial.. te das cuenta como nos amamos todos sin tener sexo???.. y sin histeriquear.. que parte no entiende la gente????
Gracias Juli.. de corazón quiero que te vaya bien y que crezcas.. y cuando curres me invites a tu fiesta!
besos.
Publicar un comentario