Voy al kiosco y un amable vecino me grita "Te hago un hijo güera".
Silencio.
30 segundos más tarde el mismo amable vecino acota " Y hasta me hago cargo de él!"
Como diría papá, una caricia para el alma.
Silencio.
30 segundos más tarde el mismo amable vecino acota " Y hasta me hago cargo de él!"
Como diría papá, una caricia para el alma.
2 comentarios:
jajajajajaj.....que flor de piropón!!!
mechi
hacía tiempo que no te leía en el blog, un encuentro con tu padre me ha hecho volver.. y me encantop este! me quede en el timepo por que es viejo..pero es de lo mejor!!!!
besot
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